En la noche del miércoles 14 de septiembre, se dio a conocer el proyecto de manto de salida para la Santísima Virgen De Belén Coronada, de estilo propio y único. El estilo de su ornamentación hace juego con el espléndido palio diseñado por el mismo artista, D. Antonio Rodríguez Quintero, ya que todo el conjunto del paso de palio sigue líneas marcadas por dicho artista.
El estilo es barroco, dividido por seis zonas que, si bien muestran cierta diferenciación, se complementan y hacen juego; la cenefa perimetral sigue el dibujo de las bambalinas del paso de palio, y presenta en su ornamentación vegetal, flores de azucena bordadas en seda de color (que significan la pureza de la Virgen, y que la representan). La distribución de sus bordados está estudiada hasta en sus más últimos detalles para estilizar el conjunto del paso como ya se ha anotado.
El manto se caracteriza por unir todos sus bordados con una lazada azul, color característico de la Hermandad y que simboliza la unión en el tiempo de todos los pileños y hermanos que han pasado por la Hermandad y que unidos han conseguido mantener el patrimonio que hoy día conserva la Corporación, siendo el más importante, la Virgen de Belén con más de 4 Siglos de devoción.
A donde las 6 zonas diferenciadas por ejes en el bordado apuntan con todas sus piezas, terminando el dibujo de cada una de las partes del manto en la cabeza de la Virgen. Como parte fundamental del manto, se encuentran las 3 cartelas que han sido diseñadas y elegidas en conjunto por la priostía de esta Hermandad, el bordador D. Antonio y que han sido ejecutadas con maestría en óleo sobre tabla por nuestro hermano Don Antonio Ignacio Cruz Colchero según los gustos del donante, y que servirán de boceto y modelo para que el bordador las ejecute en la conocida técnica de bordado en matizado de sedas naturales. Estas cartelas dan sentido al conjunto completo del manto.
Las tres cartelas bordadas en seda:
En la parte central del manto irá una cartela bordada en hilos de Seda natural de colores todo realizado a mano, (que ya está ejecutada, y que ahora, al finalizar esta intervención le pediremos al bordador que la descubra junto al Hermano Mayor), representa en forma de alegoría al Señor repartiendo pan junto a su Madre la Virgen a los pobres. Inspirado en el famoso cuadro de Murillo “La Virgen y el Niño entregando pan a los sacerdotes”, es lo que le da sentido a la existencia de esta Hermandad en Pilas, Belén como Madre de Dios, y madre nuestra, asiste, ayuda y sustenta a su Hijo en la labor de sanar nuestras heridas y nuestras caídas con el pan nuestro de cada día. Aquí, más que nunca aparece ese “Belén, casa del pan” que siempre nos acompaña y que cobra especial sentido en la vida de la familia donante.
En uno de los laterales irá bordada la escena de la Presentación de Jesús al templo, motivo principal de la devoción a la Virgen de Belén, que celebra su festividad en el día 2 de febrero, día que desde el año 2018 se celebra con grado de Solemnidad en esta Hermandad con motivo del nombramiento de Roma como patrona apud Deum de la Virgen de Belén, y que viene a representar el momento en el que Jesús es llevado al templo de Jerusalén, y del mismo modo viene a hacer alusión directa al momento que el donante recordaba con cariño y vinculaba con la Patrona, que es el momento en el que nuestros padres nos presentan a la Virgen de Belén en el año que nacemos, algo que denota la devoción y amor que se le profesa en esta Villa a su Patrona.
En una obra de este calado artístico se representará la fiesta de mayor importancia en el pueblo, el encuentro de Jesús Resucitado con su Madre, alegoría que sirve como eje central de la cristiandad pileña, tradición que perdura como las Carreritas.
La realización del manto:
El soporte donde se está realizando es de terciopelo de algodón azul real, tal y como se viene conociendo tradicionalmente, y para su composición se emplearán distintas técnicas del bordado en ORO fino como son distintos puntos de bordado, hilos y cordoncillos además de distintas técnicas. (Y que se mostrarán a continuación algunas de las piezas ya bordadas) Se rematará el manto con encaje de hojilla de oro llamado “de concha”.
El forrado del manto iría de un tejido adamascado del mismo color azul. La realización del manto se estima que durará un periodo aproximado de 30 meses, pudiendo aventurar si todo sigue el ritmo marcado por el taller de bordados y contando con que acompañen todos los agentes externos que pueden modificar los tiempos de entrega, un estreno en la semana santa de 2024.
En el manto trabajarán aproximadamente unas 6 personas, todas profesionales del arte del Bordado con una dilatada experiencia. El manto no va a suponer ningún coste para la Hermandad, ha sido donado íntegro por una persona y su familia, los materiales para su ejecución ya están comprados en su totalidad, y el taller de Bordados Rodríguez ya lleva meses trabajando en él.